La supervivencia de la Compañía Antonio Gades quince años después de la muerte de su fundador es «casi un milagro», afirmó la viuda del coreógrafo y bailaor español, Eugenia Eiriz, en una entrevista con Efe en Río de Janeiro, en donde la compañía inició una nueva gira por Brasil.
La directora general de la Fundación, afirmó que el objetivo de la Compañía Antonio Gades es llevar al público los cinco ballets creados por el coreógrafo, lo que exige grandes esfuerzos para una entidad privada y de recursos modestos.
La supervivencia de la Compañía Antonio Gades quince años después de la muerte de su fundador es «casi un milagro», afirmó la viuda del coreógrafo y bailaor español, Eugenia Eiriz, en una entrevista con Efe en Río de Janeiro, en donde la compañía inició una nueva gira por Brasil. La asistente de dirección afirmó que el objetivo de la Compañía Antonio Gades es llevar al público los cinco ballets creados por el coreógrafo, lo que exige grandes esfuerzos para una entidad privada y de recursos modestos. «Es casi un milagro la pervivencia de una compañía privada de baile tras la muerte de su fundador. Habrá muchos otros casos en el mundo. En España por desgracia somos casi una excepción», afirmó. «No se trata de una compañía de flamenco con una estrella que baila diferentes piezas flamencas, sino que hacemos historias coreografiadas por Gades, que cuentan historias universales de total actualidad», dijo. Para Eiriz, la vigencia del legado de Gades no se limita al flamenco sino a la teatralidad y al mensaje universal de sus coreografías, como «Carmen», «Bodas de Sangre» y «Fuenteovejuna». «Gades, aún teniendo el máximo respecto al flamenco, supo ver la necesidad de nutrirse e inspirarse de otras disciplinas con muchos más años de trayectoria escénica», dijo. Agregó que el coreógrafo aprovechó grandes obras de la literatura universal, en las que alternó el flamenco con otros ritmos, y citó el caso de «Fuenteovejuna», que introduce música del compositor ruso Modest Músorgski, trompetería inglesa barroca, música contemporánea de Antón García Abril y hasta acervo folclórico español. «Gades pinta sus creaciones con luz inspirada en la obra de Velázquez y de Goya. Así, logró hacer de la danza española un lenguaje universal con capacidad para contar historias universales. El espectador no se dará cuenta de todos estos cambios de época y de tradición musical. Pero sí se dará cuenta que ha visto algo especial, algo que removerá sus entrañas y que seguro será una experiencia diferente», aseguró. Para Eirez, la trilogía de películas que Gades produjo con el cineasta español Caros Saura se convirtió en uno de los mayores difusores del flamenco porque lo llevó a los cines de todo el mundo, a lugares en los que no se habla español y a personas que nunca habían oído hablar de España. «Creo que deberían poder verse más. Lamentablemente, sé que existen muchas veces dificultades para que puedan ser exhibidas públicamente», afirmó la directora antes de destacar el acuerdo que la Fundación firmó con el Teatro Real para llevar los ballets de Gades a todo el mundo. Afirmó que Gades tenía proyectos para otras películas, incluso una sobre la música y la danza de Brasil. «Llegó a pensar seriamente en hacer un proyecto fílmico en el que pudiera trabajar con toda esta riqueza musical y dancística de Brasil. Quien sabe qué hubiera sido ese proyecto. Quedaron tantas cosas en su tintero, tantas ganas de seguir conociendo, de seguir aprendiendo», aseguró. Al ser interrogada sobre si Gades, un militante comunista, hubiera vetado la actual gira por Brasil por la llegada al poder del ultraderechista Jair Bolsonaro, Eiriz afirmó que la visita fue planificada mucho antes del cambio político. «Giras de esta dimensión, en las se mueve a 29 personas, sobre todo tratándose de una compañía privada y con medios relativos, han de programarse con una antelación mínima de año y medio», explicó. «Por lo general, las vicisitudes políticas no afectan la realización de las giras. El artista no puede; no debe ser rehén de la política. Debe tener libertad para crear y para llevar su arte a cuantos más lugares del mundo mejor», agregó. La directora dijo que, transcurrido casi un año de la firma de un convenio con el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) de España para promover conjuntamente el legado de Gades, ya piensa en una ampliación. «Parte de la historia de Gades se encuentra reflejada en la documentación que la Fundación ha depositado en el INAEM para que el Estado comparta con nosotros la responsabilidad de su conservación y estudio. De momento se está elaborando un inventario mucho más exhaustivo del que nosotros hemos podido hacer», dijo. Agregó que entre los documentos cedidos para la digitalización se encuentran más de 594 archivos audiovisuales, 3.836 fotografías, 27 guiones, 150 carteles y valiosos manuscritos. «Queda mucho por hacer. En estos momentos trabajamos para realizar una adenda al comodato, ya que parece ser que hay interés en unir a esos fondos una segunda parte que inicialmente se había desechado», afirmó. Carlos A. Moreno
